Actualización Sobre Gaza. “Se Trata de Uno de los Momentos
Más Bárbaros de la Historia Humana”
La “Pausa Humanitaria”
Revolución
El domingo 16 de junio, el ejército israelí anunció
que había implementado una “pausa táctica” en los ataques a lo largo de una
ruta de 7,5 millas (la carretera Salah al-Din desde el cruce fronterizo de
Karem Shalom con Israel, al norte hasta el Hospital Europeo en Jan Yunis), a
partir del 15 de junio y continuando indefinidamente.
Los medios de comunicación estadounidenses trataron
esto con seriedad como una medida “humanitaria” por parte de Israel. NPR informó que el ejército israelí tenía como
objetivo “aumentar el flujo de ayuda a otras partes de Gaza, incluidos Jan
Yunis, Muwasi y la parte central de Gaza”. The Associated Press escribió que la pausa “podría ayudar
a abordar las abrumadoras necesidades de los palestinos que han aumentado en
las últimas semanas con la incursión de Israel en Rafah”.
Esto fue y es pura mentira: la llamada “pausa” no es
más que un miserable intento de encubrir lo que Israel realmente está haciendo:
matar de hambre sistemáticamente al pueblo palestino, destruir infraestructura
civil vital y tratar de eliminar a los palestinos en Gaza como
pueblo — es decir, genocidio. No es una coincidencia que esta maniobra
falsa se anunciara tres días después de que un
importante informe de la ONU condenó a Israel por “crímenes de guerra”
y “crímenes contra la humanidad”, incluido el uso del hambre
como arma de guerra.
He aquí una muestra de cómo es el “humanitarismo”
israelí sobre el terreno desde que comenzó la “pausa” del 15
de junio:
- Uno
o dos días después, Israel destruyó lo que había sido el punto de
entrada más importante para la ayuda humanitaria, el cruce de Rafah en la
frontera entre Egipto y Gaza. Israel tomó el cruce de Rafah el 6 de mayo y
ha estado cerrado desde entonces. Ahora, no sólo no llega ninguna ayuda
por ese cruce, sino que incluso la posibilidad de reabrirlo es más remota.
- El
17 de junio, al menos nueve palestinos fueron asesinados por
las fuerzas israelíes mientras esperaban camiones de ayuda en la
carretera Salah al-Din, ¡la misma carretera que Israel especificó
en la “pausa”!
- El
21 de junio, tanques y artillería israelíes atacaron tiendas de campaña de refugiados en al-Mawasi (a
veces escrito “Muwasi”), matando a 25 personas e hiriendo al menos a 50.
Al-Mawasi es una zona de playa desolada que Israel había designado como
“zona humanitaria” para un millón de personas en la
ciudad de Rafah cuando comenzó el ataque a Rafah el 7 de mayo. Ahora es
“el hogar” de cerca de cien mil refugiados. También se suponía que
al-Mawasi sería una de las zonas que se “beneficiarían” de la pausa.
- También
el 21 de junio, justo al sur de al-Mawasi, ataques aéreos israelíes
impactaron cerca de un complejo de la Cruz Roja Internacional, matando al
menos a 22 refugiados que estaban acampados allí por seguridad.
William Schomburg, alto funcionario de la Cruz Roja, describió tres explosiones que sacudieron el
complejo y luego una “inundación de heridos” llegó en busca de ayuda.
“Había montones de cadáveres y sangre por todos lados”. Schomburg señaló
que “Nuestra oficina aquí en Rafah, como todos nuestros edificios e
instalaciones, están marcados con el emblema de la Cruz Roja y son
conocidos por todas las partes”.
Las organizaciones humanitarias dicen que la “pausa” ha traído poca o ninguna
expansión en las entregas de ayuda que se necesitan con urgencia. El 21 de
junio, Richard Peeperkorn, representante de la Organización Mundial de la Salud
(OMS) en Palestina, dijo que “no hemos visto ningún impacto en los suministros
humanitarios que llegan desde ese... anuncio unilateral de esta pausa técnica”.
Y un representante de la ONU dijo que “Esto aún no se ha traducido en que
llegue más ayuda a las personas necesitadas”.
El mismo día, Médicos Sin
Fronteras (MSF) dijo que no había podido llevar suministros médicos a
Gaza desde abril, debido al “cierre del cruce fronterizo de
Rafah, tras la ofensiva de Israel en el sur de Gaza a principios de mayo, junto
con la interminable burocracia impuesta por las autoridades israelíes, [que] ha
congestionado dramáticamente el flujo de ayuda humanitaria”. Como resultado, es
posible que tenga que “detener o reducir drásticamente” sus operaciones de
ayuda médica en Gaza.
Genocidio: continuo y en aumento
No se trata sólo de que Israel esté bloqueando la
ayuda en lugar de facilitar su entrada. Israel también continúa su campaña para
quebrar y destruir fundamentalmente a la población palestina de Gaza, incluso
mediante la destrucción de infraestructura civil en una escala verdaderamente
masiva.
Aquí hay algunas cosas que han salido a la luz o se
han vuelto más claras en apenas la semana pasada:
Israel está destruyendo la agricultura en Gaza. Aunque Gaza siempre ha dependido de las
importaciones de alimentos, la agricultura de Gaza produjo una cantidad
significativa del suministro de alimentos. El 19 de junio, la Oficina de las
Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó que los ataques israelíes y otras actividades
militares habían dañado el 57 por ciento de las tierras agrícolas en Gaza, así
como un tercio de los invernaderos, 537 graneros y 256 almacenes agrícolas,
“perturbando gravemente” la cadena de suministro de alimentos de Gaza. Israel
también ha atacado panaderías y otras instalaciones de procesamiento y
producción de alimentos.
Israel está destruyendo el sistema sanitario de Gaza: el 19 de junio, el Programa de las Naciones
Unidas para el Medio Ambiente informó que “las cinco plantas de tratamiento de aguas
residuales de Gaza han cerrado, y las aguas residuales contaminan las playas,
las aguas costeras, el suelo y el agua dulce” y que “cinco de cada seis
instalaciones de gestión de residuos sólidos en Gaza están dañadas”. El
Director Ejecutivo Adjunto del Programa Mundial de Alimentos describió “conducir a través de ríos de aguas
residuales sin tratar” en su gira por Gaza. Amnistía Internacional informa que “entre el 90 y el 95 por ciento del
suministro de agua está contaminado y no es apto para el consumo humano. Israel
no permite que se transfiera agua desde Cisjordania a Gaza, y el único recurso
de agua dulce de Gaza, el acuífero costero, es insuficiente para las
necesidades de la población y está cada vez más agotado por la sobreextracción
y contaminado por aguas residuales y la infiltración de agua de mar”.
Israel está destruyendo las ciudades de Gaza: en los primeros meses de la guerra, las bombas,
los tanques y la artillería israelíes prácticamente arrasaron dos ciudades
importantes: la ciudad de Gaza y Jan Yunis. Más de un millón de personas que
huían de esta matanza fueron canalizadas por Israel hacia Rafah. El 6 de mayo,
Israel lanzó la invasión de Rafah. Como parte del apoyo
inquebrantable de Estados Unidos a la matanza masiva, la administración Biden
ha afirmado que no se trataba de “una operación terrestre importante” y que, en cambio, fue “más selectiva y limitada”.
Estas son sólo más mentiras para encubrir el
genocidio.
El 21 de junio, el New York Times informó sobre la “batalla de seis semanas
que ha dejado un cruce fronterizo crítico en ruinas y amplias extensiones de la
ciudad gravemente dañadas... Las imágenes de la destrucción en todo Rafah
recuerdan las escenas en la ciudad de Gaza y Jan Yunis, donde los bombardeos de
Israel y los combates callejeros entre las fuerzas israelíes y los militantes
de Hamás incrustados en zonas civiles, han dejado tras de sí islas de escombros
y cráteres donde antes había edificios y carreteras. “Nos preocupa que la
ciudad quede inhabitable”, afirmó Ahmed al-Soufi, alcalde de Rafah.
Eoghan Darbyshire, investigador de alto rango del
Observatorio de Conflictos y Medio Ambiente con sede en el Reino Unido, dijo “[E]s mi opinión que grandes áreas de
Gaza no serán recuperadas a un estado seguro dentro de una
generación, incluso con financiación y voluntad ilimitadas”. [Énfasis
añadido]
¿“Selectivo y estratégico”? Antes de la invasión, la
población de Rafah (principalmente refugiados) superaba con creces el millón de
personas. OCHA informa que hasta el 17 de mayo, 750
personas permanecían en la ciudad de Rafah, las otras expulsadas por
la invasión israelí, huyendo para vivir entre escombros y ruinas sin sistema de
agua ni suministro regular de alimentos.
Israel está destruyendo a los niños de
Gaza: la Agencia de
Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) informó el 15 de junio que más de 50.000 niños
necesitan ahora tratamiento médico inmediato por desnutrición. OCHA también informó de una “emaciación visible entre los
niños” (“emaciación” es desnutrición aguda), así como de “una falta crítica de
leche y fórmula para los bebés”.
El 20 de junio, un psicólogo infantil informó sobre una sensación generalizada de terror
entre los niños y dice que cuando llevó a cabo sesiones con niños para
ayudarlos a lidiar con el trauma, a veces “tenían que gritar para ser
escuchados, para superar el sonido de los drones y las bombas”. Una
madre habló de su anhelo de que la guerra terminara para “poder
acostarme por la noche con mi hija y prometerle que podrá despertarse”.
El 21 de junio, OCHA (citando al Ministerio de
Educación de Gaza) informó que “unos 625.000 estudiantes han estado sin
ir a la escuela en Gaza desde octubre de 2023 debido a la escalada de
hostilidades y, al 11 de junio, más de 7.000 estudiantes y 378 miembros del
personal educativo han sido asesinados en Gaza”.
El portavoz del Fondo de las Naciones Unidas para la
Infancia (UNICEF), James Elder, que se encuentra ahora en Gaza, habló al
respecto:
Pues, aquí hay una guerra de palabras constante. Pero
sólo tenemos que mirar la evidencia… durante muchos meses hemos llamado a esto
una guerra contra los niños. Y como todo aquí, lo hacemos basándonos en
evidencia. No lo hacemos buscando un titular. Lo hacemos porque de
todos los conflictos en los que opera UNICEF, o en todas las líneas de
frente, desde Afganistán hasta Yemen hasta Ucrania hasta Siria, no
hemos visto un porcentaje tan alto de los civiles heridos, mutilados y
asesinados que son niños como aquí. Es por eso. La evidencia habla de
que se trata de una guerra contra los niños”. [Énfasis añadido.]
Entre muchos ejemplos poderosos, Elder informa:
UNICEF estaba tratando a 3.000 niños con la forma más
peligrosa de desnutrición aquí en Rafah, y luego tuvimos la ofensiva militar en
Rafah, que todos rogamos que no ocurriera pero de alguna manera temíamos que
ocurriera. Esa, entre comillas, “ofensiva militar limitada”, ofensiva limitada
que provocó el desplazamiento de un millón de personas, también significó que
nuestro centro de estabilización allí, que atendía a 3.000 niños, quedó
inoperable en un minuto. Los niños que reciben tratamiento de repente
desaparecen. Ahora tenemos que intentar regresar a esas comunidades, a estos
infiernos de tiendas de campaña, para encontrar a estos niños, para encontrar a
esas familias, porque sin ese tratamiento, morirán.
Elder resalta que cuando hay desnutrición a gran
escala entre los niños, esto los impacta permanentemente, dañando su salud
física y mental general de múltiples maneras y limitando su productividad
futura. Así que, además del horror inmediato, dañar a toda una generación de
niños debilita profundamente a un pueblo en su conjunto; por ejemplo, la
capacidad de los más jóvenes para cuidar de sus mayores a medida que envejecen.
Este es verdaderamente “uno de los momentos más
bárbaros de la historia de la humanidad”1. Todo lo que Israel ha
hecho lo ha hecho con todo el respaldo (incluida la ayuda militar masiva) del
sistema del capitalismo-imperialismo estadounidense y fundamentalmente al
servicio a ese sistema, el que depende de Israel como su perro de ataque en el
estratégico Medio Oriente, haciéndole un pilar indispensable de la riqueza y
poder de Estados Unidos.
“Terminar el trabajo…” ¿Significa qué?
Recientemente, el primer ministro de Israel, Netanyahu
(Netan-Nazi), exigió aún más armas, diciendo: “Danos las herramientas y
terminaremos el trabajo…”
Piensa en esa promesa: “terminaremos el trabajo”.
Teniendo en cuenta todo lo que ha sucedido en los últimos ocho meses, esto
es extremadamente siniestro.
¿No hace esto aún más importante hacer todos los
esfuerzos posibles para que la oposición a esta guerra sea más amplia, más
profunda y más decidida? ¿Y no hace esto aún más importante profundizar en POR
QUÉ está sucediendo esto? Y, finalmente, ¿no hace esto aún más importante
examinar seriamente cómo se podría poner fin a esto, en
Palestina y en todo el mundo que ahora sufre tan terriblemente
los horrores de este sistema?
______________
NOTAS:
(1) El médico de urgencias británico James Smith, que
recientemente regresó de dos meses de trabajo con Médicos Sin Fronteras en
Gaza. Vea también aquí.
Fuente: revcom.us
El Anuncio de Biden Para un
Alto el Fuego en Gaza
Mahmoud Elalwani(*)
El
viernes 31 de mayo, el presidente estadounidense Joe Biden, en
un discurso pronunciado en la Casa Blanca sobre la situación en Medio Oriente,
dijo que Israel había presentado una propuesta para un alto el fuego sostenible
en Gaza que constaría de tres etapas y pondría fin al conflicto que lleva más
de ocho meses en marcha.
La primera fase duraría seis semanas y comenzaría con el cese de
hostilidades. Durante esta fase se liberarían mujeres, niños, ancianos y los
rehenes heridos, se produciría la retirada de las fuerzas de ocupación
israelíes de zonas densamente pobladas de Gaza y el regreso de los gazateís a
sus hogares en todas las zonas de Gaza, incluido el norte, también se
incrementaría el número de camiones cargados con ayuda humanitaria a 600 por
día.
Durante estas seis semanas, Israel y Hamás negociarán los arreglos
necesarios para llegar a la segunda fase en la que se produciría un alto el
fuego permanente. Biden reconoció que hay «una serie de detalles» que deben
negociarse para pasar de la primera etapa a la segunda porque Israel quiere
asegurarse de que sus intereses estén protegidos.
La segunda fase incluye la liberación de los rehenes restantes,
incluidos los soldados varones. En esta fase Israel retirará todas sus fuerzas
de Gaza siempre que Hamás cumpla con sus obligaciones y “el alto de fuego
temporal se convertirá en un cese permanente de las hostilidades”.
La tercera fase contempla el plan de reconstrucción de Gaza y la
liberación de los últimos rehenes.
Biden destacó que esta es la oferta que ahora está sobre la mesa. El
presidente estadounidense dijo que la continuación de este conflicto agotará
las capacidades de Israel y aumentará su aislamiento, destacando que este
acuerdo conducirá a la calma en la región, incluida la conclusión de un acuerdo
histórico entre Israel y el Reino de Arabia Saudita. Asimismo, señaló que
Israel tiene derecho a defenderse, y puntualizó que sabía que algunos miembros
del gobierno de Israel no aceptarían esta propuesta porque quieren que la
guerra continúe, quieren ocupar Gaza para siempre, pero indicó que la idea de
una victoria completa solo mantendrá a Israel atrapado en Gaza, aislándolo del
mundo y que los secuestrados no regresarán a sus hogares. Biden concluyó que es
hora de que esta guerra termine y comience la siguiente etapa.
El discurso del presidente estadounidense constituye la presentación de
una propuesta israelí, pero plantea interrogantes. Si esta propuesta no la
hubiera hecho el gobierno de Israel, el presidente de los Estados Unidos no la
habría presentado, sino que habría solicitado que la presentara el secretario
de Estado de los Estados Unidos o el presidente de su Consejo de Seguridad
Nacional. El hecho de que el propio presidente presente este plan tiene
connotaciones inusuales, es indicativo de que esta propuesta ha sido adoptada
por el gobierno de Estados Unidos porque le confiere importancia en términos de
patrocinio e implementación del plan y, al hacerlo, corta el camino al primer
ministro Netanyahu de la guerra en Gaza, para evitar que posponga el estudio de
las propuestas de paz con el fin de mantener su guerra en Gaza con armas
estadounidenses. Este es un mensaje a Netanyahu de que no debe someterse a las
amenazas de sus ministros de Seguridad y de Finanzas, Ben Gvir y Smotrich, los
más extremistas del gobierno, que están llenos de odio por la humanidad, que
practican matanzas y exterminio sin dudarlo.
La propuesta del discurso tiene mensajes dirigidos al pueblo
estadounidense y a aquellos que se levantan contra el genocidio del pueblo
palestino en Gaza de cara a la campaña electoral del próximo noviembre. También
contiene mensajes para Europa y para otros países del mundo de que Estados
Unidos apoya el cese de la guerra en Gaza para así blanquear la imagen de su
administración que ha utilizado el poder de veto en más de una ocasión
negándose a condenar la agresión israelí y que ha rechazado una resolución del
Consejo de Seguridad que solicitaba el cese de la guerra en Gaza.
El discurso de Biden no incluye una solución política a un Estado
palestino independiente con continuidad geográfica entre Cisjordania, la Franja
de Gaza y Jerusalén Oriental; sobre este tema no hay ninguna propuesta en la
iniciativa del presidente estadounidense, solo se habla de aceptar el statu quo
anterior a la guerra en Gaza, lo que supone una mayor privación de los derechos
nacionales del pueblo palestino.
_________
(*)
Mahmoud Elalwani es embajador del Estado de Palestina en Bolivia
El Impacto Positivo
del Reconocimiento Europeo al Estado de Palestina
Mahmoud Elalwani(*)
La decisión de España, Irlanda, Noruega y Eslovenia
de reconocer a Palestina como Estado soberano tiene un impacto positivo y
constituye un fuerte apoyo a la posición legal de Palestina en la escena
internacional y mejora sus posibilidades de obtener un reconocimiento pleno en
las Naciones Unidas.
Israel continúa por noveno mes
consecutivo con el crimen de genocidio contra el pueblo palestino y, aunque no
existe ninguna justificación para cometer genocidio en cualquier lugar y contra
ningún pueblo, es un hecho que está atacando a toda la población civil, pero
especialmente a niños, mujeres y ancianos. No hay duda de que las medidas
provisionales emitidas por la Corte Internacional de Justicia que pedían
explícitamente el cese inmediato del ataque militar no han sido eficaces para
detener este genocidio, Israel insiste en continuar con sus ataques contra los
palestinos mostrando un completo desprecio al tribunal y sus órdenes, además de
continuar con sus graves violaciones del derecho internacional, incluido el
derecho humanitario y de derechos humanos, de todas las resoluciones
pertinentes de las Naciones Unidas y de todos los llamamientos globales para
detener este ataque.
Es irónico y una contradicción
que el Estado de Israel, que dice ser judío y que fue sometido al Holocausto,
pase de ser víctima a convertirse en verdugo de los palestinos y que sean estos
quienes paguen el precio por lo que Europa Occidental hizo a los judíos cuando
vivían en sus sociedades. Los palestinos fueron desarraigados de su país,
asesinados y mutilados, y actualmente somos testigos de una limpieza étnica,
del castigo colectivo y del genocidio en un Estado de apartheid.
Una de las principales razones
de la crisis actual es la falta de adopción de una postura firme hacia el
Estado de ocupación israelí y la incapacidad de la comunidad internacional para
disuadir a dicha entidad. Israel se refugia en los Estados Unidos y ello supone
una fuerte barrera a cualquier acción contraria a Israel. Lo más sorprendente
es que, tal y como han anunciado algunos medios occidentales, la Cámara de
Representantes estadounidense tenía la intención de votar sobre la imposición
de sanciones contra los jueces de la Corte Penal Internacional por su actuación
ante la emisión de la condena contra varios líderes israelíes, encabezados por
Netanyahu.
El Consejo de Seguridad debe
actuar de conformidad con sus deberes y cumplir con sus responsabilidades
jurídicas y humanitarias, debe poner fin urgentemente a la guerra genocida en
Gaza, que hasta ahora ha provocado la muerte de más de 37 mil ciudadanos
palestinos y herido a más de 84 mil palestinos, la mayoría de los cuales son
niños y mujeres.
Este conflicto que dura muchos
años no ha sacudido la conciencia de toda la comunidad internacional, se trata
como si fuera un conflicto regional, como un conflicto entre dos pueblos, como
si estuvieran peleando por la misma tierra. Los palestinos no se disputan la
tierra, ¡están en su tierra! Los sionistas son intrusos, han venido a
apoderarse de nuestra tierra. No es un conflicto entre dos pueblos por tierras
que ambos poseen. Israel es el ocupante que ha invadido nuestras tierras. El
proyecto sionista ha sido apoyado por la comunidad internacional y, por lo
tanto, la comunidad internacional debe asumir la responsabilidad de sus
decisiones y políticas hacia Palestina.
Poner fin al conflicto y
restaurar la calma en la región de Oriente Medio está relacionado
principalmente con la cuestión palestina y debe terminar con una solución justa
del conflicto. La dificultad del asunto radica en la intransigencia y
arrogancia del gobierno de ocupación israelí, que planea poner fin a la causa
palestina masacrando y desplazando a los propietarios de las tierras. Acabar
con la brutal ocupación israelí y establecer un Estado palestino independiente
con Jerusalén Oriental como su capital es un requisito legal, moral y político
indispensable para lograr la estabilidad, la seguridad, la prosperidad y la
coexistencia pacífica entre los pueblos de la región. Es necesaria una solución
política de este conflicto sobre la base de una solución de dos Estados que
permita satisfacer las necesidades de seguridad de Israel, por un lado, y las
aspiraciones de los palestinos de establecer su Estado, por otro.
De ahí el creciente
reconocimiento del Estado de Palestina que debe traducirse sobre el terreno en
medidas prácticas que obliguen a Israel a adherirse a la legitimidad
internacional y a las normas del derecho internacional pertinentes. El
reconocimiento europeo del Estado de Palestina avergonzará a algunos estados de
la comunidad internacional y los empujará a alcanzar el pleno reconocimiento
internacional del Estado de Palestina, lo que es un punto de inflexión que
también puede conducir al fin de la guerra en la Franja de Gaza.
Palestina no debe ser
utilizada como herramienta en un conflicto global. Sí, un conflicto así podría
conducir a una guerra regional y podría arrastrar a una guerra mundial.
_________
(*) Mahmoud Elalwani es
embajador del Estado de Palestina en Bolivia.