¡Defender el Pensamiento de Mariátegui de toda Tergiversación y Desarrollarlo en Función de la Realidad Actual!
El Partido del Proletariado en el Sentido Histórico y
la Reconstitución
Cesar Risso
EN EL LIBRO de
Eduardo Ibarra Algunas cuestiones sobre el Partido del proletariado y la
reconstitución del Partido de Mariátegui1, se presenta una
síntesis de la evolución del Partido del proletariado. Lo relevante de esta
síntesis radica en que considera al partido del proletariado en el sentido
histórico. Esto es, como la asunción de la misión histórica del proletariado.
Esta
forma de concebir el Partido del proletariado encuentra expresión en Carlos
Marx:
“He
procurado, además, disipar el equívoco de que yo entendía por partido una
organización muerta desde hace ocho años o la redacción de un periódico
extinguido hace doce. No; yo siempre he entendido por partido el Partido, en el
gran sentido histórico de esta palabra.”2
Pues bien,
Eduardo Ibarra resume como sigue la evolución del partido del proletariado:
“Grosso modo, puede decirse que, durante el siglo XIX, el partido
proletario pasó por las siguientes etapas: el partido surgido espontáneamente,
no homogeneizado por el marxismo, como fue el cartismo (existente desde antes
del surgimiento del marxismo); el partido adherido al marxismo, como fue la
Liga de los Comunistas; el partido carente de una determinada forma
organizativa, como ocurrió durante el reflujo del movimiento obrero europeo
entre 1850 y principios de la década de 1860; el partido-frente, como fue la
Asociación Internacional de los Trabajadores; nuevamente el partido adherido al
marxismo, como fueron el Partido Obrero Socialdemócrata Alemán, la Segunda
Internacional, etcétera.”3
Aquí se
destaca el carácter proletario del partido por la composición de sus
militantes, que existía como un partido obrero independiente.
Pero, si lo que se enfatiza es el
carácter proletario del partido por la adhesión al marxismo, entonces
“[…] en cuanto al partido marxista se
refiere, es necesario subrayar una situación sui generis de su
existencia: carente de organización, el partido marxista existió como el ala
izquierda del movimiento cartista (Julián Harney, Ernest Jones, etc.); y lo
mismo ocurrió en la Asociación Internacional de los trabajadores (Marx, Engels,
etc.)”
Considerando ambos
caracteres, nos dice Eduardo Ibarra que
“[…] puede decirse que, entre la segunda mitad de la década de 1830 y el
año de 1871, la regla fue el partido-frente, y la excepción el partido
marxista. Hoy ocurre lo contrario: la regla es el partido marxista, y la
excepción el partido-frente […]”
La importancia
de los conceptos expuestos en la evolución del partido proletario radica en que
permite apreciar con mayor claridad la situación de la existencia del partido
proletario en la actualidad, es decir, tomando en cuenta el Partido del
proletariado en el sentido histórico.
Una
de las cosas que pueden deducirse de lo expuesto por Eduardo Ibarra es que,
desde la aparición del capitalismo, los obreros se vieron conducidos a
organizarse para defender sus derechos. Esto, que se expresa como una
necesidad, se nos aparece como una ley que se da en el desarrollo de las
diferentes formas de organización de los obreros que empiezan a adquirir un
nivel de consciencia cada vez más aguzado. Sin embargo, por sus propios medios los
obreros solo podían llegar a organizarse para enfrentar las condiciones
precarias en las que vivían, pero sin tener conciencia de clase, vale decir,
sufriendo las consecuencias de una situación que no comprendían. Esta fue la situación
del cartismo.
En
el caso de la Liga de los Comunistas la situación cambia.
Sobre
esto nos dice Eduardo Ibarra:
“[…]
Engels señaló que la Liga de los Comunistas tuvo sus orígenes
‘…
en «dos corrientes independientes»: de una parte, «un puro movimiento de los
trabajadores», y, por la otra, «un movimiento teórico, proveniente de la
desintegración de la filosofía hegeliana», asociado predominantemente con Marx.
«El Manifiesto comunista de 1848», agregaba, «marca la fusión de ambas
corrientes».”4
Sobre el
particular, refiriéndose a la teoría socialista, Engels dice lo siguiente:
“El
socialismo moderno es, en primer término, por su contenido, fruto del reflejo
en la inteligencia, por un lado, de los antagonismos de clase que imperan en la
moderna sociedad entre poseedores y desposeídos, capitalistas y obreros
asalariados, y, por otro lado, de la anarquía que reina en la producción. Pero,
por su forma teórica, el socialismo empieza presentándose como una
continuación, más desarrollada y más consecuente, de los principios proclamados
por los grandes pensadores franceses del siglo XVIII. Como toda nueva teoría,
el socialismo, aunque tuviese sus raíces en los hechos materiales económicos,
hubo de empalmar, al nacer, con las ideas existentes.”5
Tomando ambas
citas se tiene tanto la dialéctica hegeliana como el materialismo francés. Ambas
expresiones filosóficas se unimismaron en el marxismo, lo que condujo a la
comprensión cabal de la explotación capitalista, y así a dotar de conciencia de
clase al proletariado.
En
el Perú, la organización de los obreros empalmó con la asimilación y desarrollo
del marxismo por parte de José Carlos Mariátegui. Así, la fusión del movimiento
obrero independiente con el marxismo de Mariátegui se concretó en el Partido
Socialista.
El
proceso de Reconstitución del partido de Mariátegui requiere el reconocimiento
de la existencia del partido del proletariado, que, por su carácter doctrinal,
adherido al marxismo-leninismo y al pensamiento de Mariátegui, se encuentra sin
una forma orgánica definida, disperso en pequeños colectivos e individuos.
Como
señala Eduardo Ibarra, la ley de formación del partido proletario es la de
pasar del partido de cuadros al partido de masas. Esto es, de la formación del
partido del proletariado como un partido de cuadros ligado a las masas, a un
partido de masas (militancia extensa de obreros y campesinos) y de cuadros, por
la adhesión al marxismo-leninismo de sus militantes.
En
la actualidad, en la lucha contra las diversas desviaciones en el seno del
proletariado, se ha logrado desarrollar y expresar el contenido correcto de la
Reconstitución. Así,
“Solo en la primera década del presente siglo se enderezó lo torcido en
punto a la Reconstitución: hoy se sabe que esta tarea es un sistema cuyos
componentes se encuentran intrínsecamente relacionados entre sí: 1) retoma de
los Fundamentos del Partido de Mariátegui; 2) desarrollo de tales Fundamentos
conforme a la situación actual; 3) enraizamiento en las masas y dirección de
las mismas.”6
Como resultado
de esta lucha por la defensa de los Fundamentos del Partido de Mariátegui, se
tiene que
“En torno a tales elementos del sistema de la Reconstitución, ha habido
una larga e intensa lucha que, finalmente, ha dado el fruto esperado: un
concepto correcto de la Reconstitución y, por lo tanto, una base real, concreta,
fructuosa para la acción de los Continuadores de Mariátegui.”7
Así pues, la
forma específica que se puede vislumbrar es la que va del partido disperso a la
unificación de los colectivos e individuos que adhieren al marxismo-leninismo y
al pensamiento de Mariátegui, dando por resultado el Partido del proletariado
que alcanza tal estatus como resultado del proceso de Reconstitución.
__________
(1) Eduardo
Ibarra, Algunas cuestiones sobre el Partido del Proletariado y la
Reconstitución del Partido de Mariátegui. Editorial Creación Heroica,
octubre 2023.
(2) Franz
Mehring, Carlos Marx. Carta de Carlos Marx a Freiligrath Págs. 299-300.
Ediciones Grijalbo, 1967.
(3) Eduardo
Ibarra, Ibidem, pág. 11.
(4) Ibidem,
pág. 8.
(5) Federico
Engels, Del socialismo utópico al socialismo científico.
(6) Eduardo
Ibarra, Ibidem, pág, 71.
(7) Ibid.
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