domingo, 3 de diciembre de 2017

Economía

Lucha Económica Interburguesa

César Risso

LA EXPLOTACIÓN CAPITALISTA se encubre en varias formas, a tal punto que hasta se nos presentan como generosa ayuda a los pequeños productores.

        Un caso particular es el financiamiento barato que las pymes obtienen a través del factoring.

“Cerca de 4,000 millones de soles fueron financiados a través del factoring por las pequeñas y medianas empresas (pymes) en lo que va del año, informó el presidente de la Bolsa de Valores de Lima (BVL), Marco Zaldívar.

Destacó que este esquema de la factura negociable le ha dado a las pymes la oportunidad de salir del sistema bancario donde les cobraban un interés más alto para vender esa factura.

‘Esta es una manera de democratizar este escenario de financiamiento para las pequeñas empresas’, manifestó.” (http://diariouno.pe/2017/12/02/factoring-financio-a-4000-pymes/)

Tomemos el dato en su valor redondo, de 4000 millones de soles. A este monto asciende el financiamiento de 4000 pymes. Esto quiere decir que, en promedio, cada pyme recibió un financiamiento de un millón de soles.

        Quiere decir, también, que este monto fue el que dejó de financiar la banca, en lo que va del año 2017. Esto implica dejar de recibir por parte de los bancos los intereses por el servicio de crédito, o de factoring.

        Este mecanismo, que consiste en el adelanto del valor de las facturas, aplicándosele un descuento, que viene a ser el pago por el servicio de adelanto de valor de la factura, constituye otra modalidad de financiamiento de las empresas.

        Las formas de financiamiento cambian, pero el contenido es el mismo. Aunque se nos habla del valor del dinero en el tiempo, en realidad, se trata de lo que se puede obtener como beneficio al aplicar el dinero en una actividad económica.

        Supongamos que el dinero prestado (hemos dicho que la forma cambia, pero el contenido es el mismo), se destina a financiar la producción de una mediana empresa. De dónde paga esta empresa los intereses por el crédito obtenido. Lo hace de las utilidades que obtiene por la producción. Esta utilidad es posible, porque a través del trabajo asalariado, el empresario (pequeño o mediano) puede quedarse con una parte del nuevo valor creado por los obreros. El trabajo no remunerado es la fuente de la utilidad. No es, pues, el tiempo el que le da valor o hace crecer el dinero, sino el despliegue de la fuerza humana de trabajo.

        De todo el nuevo valor creado, una parte corresponde a los trabajadores, en sus diversas modalidades; otra parte corresponde a los industriales bajo la forma de ganancia industrial, por la creación de las mercancías; otra parte se destina a los propietarios de los comercios, por la venta de las mercancías producidas; una parte se la apropian los propietarios de las instituciones financieras, por el servicio de financiamiento de las actividades económicas, y finalmente una parte pasa a manos de los propietarios de los locales e instalaciones en donde se realizan las actividades económicas.

        En síntesis, la plusvalía extraída al trabajador en la actividad industrial, se reparte entre los propietarios de las diversas formas de capital.

        Otro aspecto a tener en cuenta, consiste en la competencia entre los diversos sectores de la burguesía por apropiarse de una mayor parte de la plusvalía extraída en el sector industrial.

        Y, finalmente, en el seno de cada sector de la burguesía, se da la lucha entre las empresas, por obtener una mayor tajada de los resultados de la explotación del trabajo asalariado.

        Así, las pymes se ven obligadas a ceder una parte de la plusvalía obtenida, a las empresas financieras.

        Es como si el gran capital expropiase a los trabajadores asalariados, utilizando como intermediarios a los diversos sectores de la burguesía, y a las pequeñas y medianas empresas.

        Si agregamos, para completar el cuadro, a la burguesía imperialista; esta última, explota a la humanidad entera, a través de las burguesías nacionales.

        Las pymes, que son un medio para la gran burguesía nativa y para la gran burguesía imperialista, son agentes de explotación. En esta condición, sea alto o bajo el costo del crédito, o de cualquier forma de financiamiento, son parte del engranaje de la explotación capitalista, y, en consecuencia, es parte de las formas a ser superadas por el socialismo, que no consiente ninguna forma de explotación del hombre por el hombre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

CREACIÓN HEROICA