Economía

La Deuda Externa Como Solución a la Crisis

César Risso

LOS BONOS A 100 AÑOS, que ha colocado el Perú nos muestra que la vida sobra en estos momentos, y que hay varias generaciones futuras que tienen que financiar a las presentes.

        La burguesía ha logrado el alucinante negocio de tomar decisiones que le permitan apropiarse de parte de la plusvalía que pueden extraer directamente a los trabajadores en el presente, y además, apropiarse de parte de la plusvalía que les puedan extraer a los trabajadores en el futuro, a lo largo de 100 años. En otras palabras, han confiscado la fuerza de trabajo. 

          Es decir, que a estas alturas, la población existente actualmente en el Perú, a pesar de crear los bienes y servicios que se requieren para su existencia, no tienen los recursos monetarios para adquirirlos. Estos son los juegos que permite el dinero en el régimen burgués. Si con préstamos podemos adquirir bienes y servicios, quiere decir que hay producción suficiente, de lo contrario de nada serviría el dinero; y que si hay producción, hay trabajadores que han laborado; y, finalmente, que la riqueza que han creado los trabajadores, en su expresión monetaria, contiene tanto su remuneración como las ganancias de los capitalistas, pero que a estos les resultan insuficientes, viéndose obligados a asegurarse la plusvalía de las generaciones futuras. La deuda externa es pues una modalidad de la explotación burguesa, en la que la burguesía sobre explota a la fuerza de trabajo pagándole cada vez menos para así asegurar la continuidad de la explotación, en este caso, por 100 años.

“Perú colocó el lunes deuda en tres tramos por 4.000 millones de dólares, incluyendo su primer bono a plazo de un siglo, en medio de una sólida demanda luego de vivir una de sus peores crisis políticas con tres presidentes en menos de dos semanas.”*

Este espaldarazo del mercado internacional es un evidente apoyo a la gestión de Francisco Sagasti. Hay pues confianza del capital internacional en la continuidad de la política a favor de las empresas de los países imperialistas. De otro lado, se ha reforzado el control que ejerce la gran burguesía internacional sobre nuestra economía semicolonial.

“Los bonos peruanos fueron colocados días después de la expulsión de un presidente, la renuncia de otro y la designación del mandatario interino Francisco Sagasti, tras unas protestas que dejaron dos muertos y decenas de heridos.

Olivares afirmó que durante las protestas el mercado reaccionó y hubo volatilidad respecto a los valores de Perú, castigando a sus bonos y moneda, pero luego se estabilizó cuando ingresó el presidente de transición Sagasti que asegura la realización de las elecciones generales el 11 de abril.

‘El mercado confía en que la economía va seguir manejándose en base a las prudentes políticas fiscales’, manifestó.”

¿Podemos creer que el mercado internacional tiene interés en las elecciones generales del 11 de abril, y en el buen manejo de la política fiscal, en el sentido en que nos transmiten estas noticias? Lo que a la gran burguesía le interesa es ganar a través de las inversiones que realiza, donde sea y como sea, a través de guerras, golpes de Estado, dictaduras, etc. Lo que se puede apreciar es que el respaldo nacional e internacional a la presidencia de Sagasti se ató al endeudamiento. Ganó así la burguesía un gran negocio que le va a reportar considerables ganancias. ¿Quiénes velarán por el “buen” manejo de la política económica en nuestro país? Primero, los mismos representantes de la burguesía en el gobierno, e, incluso, por encima de ellos, las instituciones financieras internacionales encargadas de supervisar el “apropiado” desarrollo de los negocios burgueses.

        Si, como hemos señalado, ya está confiscada parte de la plusvalía que crearán a lo largo de los próximos 100 años las nuevas generaciones de trabajadores, entonces, cómo se llevará a cabo la explotación de esos trabajadores. Si parte de la ganancia que crearán ya tiene dueño, con lo cual habrán también desplazado de la propiedad de parte de la plusvalía futura a los otros sectores de capitalistas, reduciéndose la cantidad de plusvalía que queda por apropiarse, entonces lo único que les queda a estos otros sectores de la burguesía es pagar cada vez menos a los trabajadores, como lo han venido haciendo. Con ello, la sobre explotación llegará a límites físicos y morales insostenibles.

           Como se puede ver, la burguesía no tiene límites en su ambición de poseer cada vez más, para lo cual tiene que intensificar la explotación a los trabajadores a los que extrae directamente plusvalía. Esta situación pone a la burguesía frente a la crisis que su propia ambición provoca, bordeando los límites de su autodestrucción. Sin embargo, el desplome de la burguesía y del sistema que ha creado no se dará de forma automática.

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(*) Las citas corresponden al siguiente link https://www.infobae.com/america/agencias/2020/11/24/peru-coloca-historico-bono-a-100-anos-a-solo-dias-de-una-profunda-crisis-politica/